Antonio Rodríguez habla con convencimiento de un modelo en el que cree. No es algo impostado. El director del centro asociado de la UNED en Zamora entiende que el sistema formativo semipresencial que propone su Universidad ofrece un abanico de ventajas suficiente como para seguir atrayendo a los alumnos en un marco en el que la oferta presencial y online no deja de crecer. Lo cierto es que, a pesar de los cambios sociales y educativos que han traído los tiempos, la UNED resiste con fuerza, e incluso crece. Esa es la expectativa también para el curso 2024-2025, cuyo plazo de matrícula seguirá abierto hasta el 22 de octubre.
– La educación a distancia era, en sus orígenes, algo muy diferente a lo que es ahora. ¿Qué es lo que ha cambiado y qué permanece?
– Lo que cambia son las herramientas, que se adaptan a los tiempos. En los años 70, cuando nace esta universidad, la herramienta que existía era el correo, y por ahí se enviaba la información. Ahora, eso ya no lo tenemos que hacer. Podemos mandar un correo electrónico, abrir una pantalla y utilizar toda la tecnología que nos dan las TICs. Pero el modelo es el mismo, lo esencial no ha cambiado. Tampoco ha cambiado lo que identifica a esta universidad, que es que somos herederos de la institución libre de enseñanza y, por lo tanto, creemos en la libertad del individuo y, por supuesto, en la libertad del alumno. Ayudamos en todo lo que podemos, pero, a fin de cuentas, tú aprendes y un día te examinamos.
– ¿Qué es lo que diferencia a la UNED?
– Que somos semipresenciales. Es decir, no exigimos la presencialidad, pero la damos. Cualquier alumno puede asistir a las tutorías presencialmente u online, como él quiera. Todo alumno puede utilizar esas herramientas, pero nosotros no evaluamos la asistencia o no asistencia. Tú asistes si quieres o puedes. Y, si no, utilizas otro de los mecanismos. Es eso de la libertad que decía antes. Nosotros creemos en la libertad del alumno. Eso es muy peligroso porque la libertad hay que utilizarla adecuadamente, y uno de los requisitos necesarios para conseguir el éxito es una gran capacidad de organización por parte del alumno. La presencial cada vez se parece más a los antiguos institutos donde te iban llevando un poquito de la mano. Nosotros no hacemos eso. Nosotros creemos en ti, pero tú también tienes que hacerlo y ser capaz de ser responsable y hacer tú ese trabajo de organización. Cuando eres capaz de superar los exámenes de una universidad tan rigurosa como la nuestra, has de ser consciente de que sus títulos tienen prestigio social y empresarial en todos los lugares. Además, tenemos 62 centros en España y más de 200 aulas como Béjar o Ciudad Rodrigo o Benavente. Siempre va a haber un aula o un centro cerca de ti.
– ¿Aspiran a ofrecer esa flexibilidad tan demandada en estos tiempos?
– Nos adaptamos. Si uno se fija, tenemos una serie de frases pero que son algo más que frases, son puras realidades. Por ejemplo, «estés donde estés», porque nosotros llegamos a cualquier punto de España. Tenemos alumnos de la Gran Vía o del Paseo de Gracia, pero también en Porto de Sanabria, por ejemplo. Y a todos les damos los mismos sistemas y les vamos a exigir ir a un centro a examinarse. A partir de ahí, tú tienes absoluta libertad para organizarte como quieras. Y organizar tu tiempo, obviamente. No tienes que matricularte de todo el curso. Es más, si es la primera vez que te acercas a la UNED, te conviene matricularte de muy poquito. Muy, muy poquito. Menos de la mitad de lo que estés pensando. Porque lo primero que tendrás que entender es cómo funciona nuestro método. Es distinto. Es muy exigente, es diferente. Pero se puede aprobar. O sea, nosotros este año tenemos cerca de 200 titulados del curso anterior.
– ¿Ese modelo se está trasladando a todos los campos del conocimiento o cuesta llegar a algunos?
– Hasta este momento, el área de salud es la parte en la que menos desarrollamos. Solamente tenemos Psicología. Pero en el resto estamos en todas. En la parte de humanidades es muy conocida nuestra presencia. En la parte científica de ciencias puras tenemos las carreras más emblemáticas como Matemáticas, Física o Química. Y también contamos con Ciencias Medioambientales o diferentes ingenierías. Los tres últimos grados que hemos implementado en el centro de Zamora fueron Educación Infantil, Ingeniería de la Energía y Ciencias Medioambientales. Ahora, a nivel nacional, se van a añadir Inteligencia Artificial y Comunicación.
– ¿Necesitarían más espacios para poder acoger los servicios presenciales?
– Nosotros somos tremendamente frescos. Nos podemos adaptar a cualquier cosa. Lo que sucede es que las adaptaciones siempre tienen un precio, como todo en la vida. En este caso, nosotros podemos adaptarnos a tener determinadas carreras. Las carreras que tenemos las vamos a seguir dando. ¿Qué puede ocurrir? Que si seguimos con pocos espacios o incluso se redujeran, pues tendríamos que quitar clases de Tercero o de Cuarto. Quitarlas aquí, que luego se siguen dando desde Pontevedra, Gijón, Plasencia o donde sea y se pueden seguir online, de la misma manera que otra gente sigue de esa manera lo que nosotros impartimos. En este planteamiento, creemos que los alumnos de los primeros cursos son los que más ayuda nuestra necesitan, más presencialidad. Por tanto, intentamos dar todas las tutorías de Primero y Segundo. Y si en Tercero y Cuarto tenemos que dar muchas menos, pues damos muchas menos.
– ¿Hasta qué punto les ha ayudado la extensión de la fibra óptica para llegar, sobre todo, a las zonas rurales?
– Mucho. La realidad es que ahora casi todos los alumnos nos siguen online. También es otra de nuestras frases: nos adaptamos como tú lo quieras.
– En paralelo a todo este proceso del centro asociado y todo lo que tiene que ver con las carreras universitarias, la UNED Zamora está desarrollando cada vez más otra vía, que es la de los cursos, la de intentar tener presencia en la sociedad ¿Esta va a ser una pata cada vez más larga?
– Toda universidad tiene tres patas. Una es la formación, obviamente, la fundamental. Pero también la investigación y la transferencia de conocimiento, la divulgación. Aquí hemos creado un área de extensión universitaria para hacer ese trabajo, porque entendemos que hay que llevar a la sociedad todo el conocimiento que sea posible. Próximamente haremos un curso sobre fiscalidad y despoblación, que creemos que es un tema trascendente para Zamora. Básicamente, vendrán profesores de derecho tributario, de gran prestigio nacional, desde las distintas universidades de Castilla y León, de nuestra propia universidad y de otras más alejadas. Vamos a seguir con esta línea y también con las exposiciones
También sigue la UNED Sénior.
Sí, acabamos de abrir la matrícula y ya está ocupándose. Hemos duplicado la capacidad de la asignatura de arte, pero no lo podemos hacer con todas. La realidad es que el éxito es absoluto, nos desborda. En Benavente y en Puebla va más lento que aquí, pero estamos convencidos de que van a llenarse las plazas en los tres sitios sin ningún tipo de dificultad. Obviamente, los números se acomodan a la población que hay en cada lugar, no podemos ponerlos de otra forma. Y además el modelo de Puebla es un modelo que nos gusta mucho, porque es más difícil, es un reto. Naturalmente, en un sitio de 1.400 habitantes poder dar esto, pues es una ruina, como te puedes imaginar, pero consigue lo que pretendemos: el objetivo académico y combatir la soledad. La idea, además, es que la gente que lo sigue desde otros pueblos se pueda juntar y compartirlo. Lo hacen, por ejemplo, en Rionegro del Puente, y es un ejemplo paradigmático de lo que pretendemos.
– ¿Tienen otros proyectos en marcha para tratar de profundizar en la realidad de los pueblos?
– Ahora estamos a la espera de una posible subvención de la Secretaría de Estado para el Reto Demográfico para poner en marcha un proyecto que sirva para romper la brecha digital. Trataríamos de llegar a todos los pueblos de Zamora.