La familia de la menor que denuncia sufrir acoso escolar en el CEIP de Morales del Vino, algo que niega Educación, reitera que la situación de su hija se encuadra en los límites de lo que ellos consideran abuso escolar y niega que exista un problema con la familia de la otra menor, como ayer apuntaban fuentes oficiales. “No podemos tener nada en contra de ellos, nunca coincidimos a la entrada ni a la salida ni en ningún acto social”, asegura el padre de la menor, Jesús González, que apunta además que “el acoso que recibe mi hija es estrictamente en tiempo escolar y dentro del recinto escolar”.
La familia asegura además que a fecha de ayer todavía no se habían reestructurado las aulas como se acordó la semana pasada, medida que piden que se tome ya. El colegio, aunque está en contra de la propuesta, acata la decisión de Educación y llevará a cabo una reestructuración integral de las dos aulas de sexto de Primaria para no significar a las dos niñas, según se acordó en una reunión celebrada la semana pasada. A fecha de ayer, esto todavía no se había hecho. “Mi hija sigue en la misma aula que la acosadora”, asegura el padre. “Solo queremos que nuestra hija no coincida con la acosadora. Con la maestra ya no coincide, porque se acaba de jubilar”, aseguran las mismas fuentes.
González dice no sentirse sorprendido con las declaraciones del lunes del delegado de la Junta, que aseguraba que no hay acoso, “porque es lo que llevan años diciendo” y reitera que “el acoso escolar es un mal social, pero el sistema educativo prefiere seguir trabajando como se trabajaba antes y evitar problemas profesionales”. Continúa el padre apuntando que “no sabemos en qué consiste el protocolo que dicen que se aplicó” y que “no se indagó” en la relación de las dos niñas para intentar buscar problemas.
Sobre la denuncia penal interpuesta cabe señalar que el juzgado informó rápidamente a la familia de que la niña denunciada, por ser menor de 14 años, es inimputable.