La Guardia Civil de Zamora ha procedido a la destrucción de varios cartuchos de dinamita hallados en una vivienda de Manzanal de Arriba, en la provincia de Zamora. A finales del pasado mes, una vecina de la localidad puso en conocimiento de los agentes el hallazgo del material en una caja de cartón, encontrados en una limpieza del sobrado anexo a la vivienda que había sido de su padre.
Ante esta situación se activa el protocolo de seguridad establecido, desplazándose hasta ese lugar componentes de seguridad ciudadana del Puesto de Villardeciervos, con el fin de señalizar y asegurar el lugar de la aparición de los explosivos, hasta su comprobación y valoración por miembros del Equipo EBYL-NRBQ de la Comandancia de Zamora.
Una vez realizada una primera valoración visual del material hallado y su identificación, se certifica que se trata de 32 cartuchos de 100 gramos de dinamita negra fabricada en la década de 1950 por la Unión Española de Explosivos y aproximadamente ocho metros de mecha lenta que podría provenir de alguna explotación minera.
Debido a la antigüedad del material explosivo y minimizar el riesgo en su manipulación, se solicita la presencia del Grupo GEDEX de la Guardia Civil (Grupo de Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos) que se traslada desde su sede en Valladolid, para llevar a cabo la destrucción controlada del explosivo.
Para este tipo de servicios la Guardia Civil cuenta en la actualidad con personal altamente especializado tanto en la búsqueda, TEBYL-NRBQ (Técnico búsqueda y localización de explosivos); como en su desactivación, TEDAX-NRBQ (especialistas en detectar, neutralizar y desactivar artefactos explosivos, incendiarios, radiactivos, biológicos y químicos).
Todo este tipo de explosivos, proyectiles o artefactos hallados casualmente, representan un gran riesgo para las personas si se manipulan. Por ello, la Guardia Civil aconseja y recomienda no tocarlos nunca, señalar el lugar de la aparición para poderlo reconocer posteriormente y dar aviso a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado para su recogida y posterior destrucción.