En el Salón de Plenos de la Diputación, y con el responsable de Turismo, Víctor López de la Parte, al frente han comparecido este jueves, todos juntos, los alcaldes de Benavente, Toro y Alcañices, y los concejales responsables del área en Zamora, Fermoselle y Puebla de Sanabria. El encuentro no ha sido azaroso. La imagen de estos dirigentes unidos aspiraba a transmitir esa sensación de piña entre los encargados de dinamizar el sector desde la parcela pública, y pretendía igualmente cerrar filas tras lo que consideran una buena primera parte del año, a pesar de lo que diga el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Y lo que dicen esas cifras es que la cosa no ha ido bien: «Eso es contradictorio con los datos que nosotros manejamos», ha advertido López de la Parte, que se ha referido a otras fuentes que indican que el turismo marcha viento en popa en Zamora. Entre ellas, se encuentran las propias estadísticas de las oficinas de turismo repartidas por la provincia y, sobre todo, las del boletín de coyuntura turística de la Junta. El diputado ve más fiables esos indicadores que los del INE, y ahí los números hablan de un crecimiento superior al 5% entre enero y julio si se compara el acumulado con el de 2023.
En cifras totales, Zamora creció hasta los 246.507 viajeros entre enero y julio y subió hasta las 390.029 pernoctaciones, aunque en ese segundo indicador el crecimiento apenas ha sido del 0,46%. «Vamos en buena línea», ha constatado López de la Parte, que ha confirmado que, de cara a 2025, la promoción irá orientada al marketing digital. En concreto, a través de la colaboración con creadores de contenido especializados en viajes. «Es un canal muy importante y tenemos que estar más presentes», ha constatado el político.
López de la Parte ha añadido a su explicación algunos datos de las oficinas de turismo que hablan de un crecimiento generalizado. Particularmente, en el caso de Alcañices, cuyo alcalde, David Carrión, ha apuntado que el incremento del horario en la oficina ha resultado de mucha ayuda para el turismo en la zona: «Zamora no está tan muerta como algunos quieren», ha advertido el regidor.
A partir de ahí, el resto de los participantes en la comparecencia han ido por la misma línea, empezando por el diputado de Turismo de Zamora capital, Christoph Strieder, que se ha mostrado optimista en relación al futuro y que ha recordado que la provincia se encuentra en un buen momento, sobre todo si se compara con el contexto de Castilla y León.
El optimismo de Benavente y Toro
Por parte de Benavente, Beatriz Asensio ha confiado en que los datos repunten en septiembre, mientras que, desde Toro, Rafael González se ha mostrado aún más confiado y ha aseverado que, en algunos días del verano, su municipio, que habitualmente cuenta con 8.500 habitantes, ha llegado a tener 40.000 personas: «Nos tenemos que volcar, porque el turismo también exige servicios», ha zanjado el alcalde.
Ya desde Puebla de Sanabria, Luisa Velasco ha remarcado que su municipio se está consolidando como zona de paso hacia Galicia y Portugal, mientras que Yolanda Robles, de Fermoselle, ha destacado la apertura de la zona del castillo de la localidad como empujón clave para el crecimiento del turismo que se ha experimentado en este rincón fronterizo.