«Quien prende el monte es un pirómano, un enfermo que no puede estar en la sociedad». Estas palabras son las que ha pronunciado el presidente de la Diputación y también alcalde de Trabazos, Javier Faúndez, al ser preguntado sobre las causas del incendio que se declaró en su municipio el pasado sábado, que llegó a nivel 2 y que apuntaba a que había sido intencionado desde los primeros momentos. «Espero que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad puedan sentarlo ante el juez y que pague por el daño que ha hecho», añade Faúndez.
El alcalde de Trabazos asegura que en el pueblo hay «preocupación» por la posibilidad de que «tengamos un pirómano» en el vecindario. «No entiendo a una persona que es capaz de prender el monte con frialdad, que provoca desastres medioambientales y que pone en riesgo» a las personas encargadas de apagar las llamas. «Son personas que no pueden estar en la sociedad a día de hoy».
La recuperación del monte
Sobre la regeneración de las alrededor de trescientas hectáreas que ardieron en la tarde-noche del sábado y en la mañana del domingo, Faúndez asegura que «la naturaleza siempre sale adelante», aunque habrá que acometer replantaciones en los pinares más jóvenes.
«Aunque la pérdida está ahí, la naturaleza se recupera. Lo importante es que cuando alguien quema el monte pone en peligro la vida de otras personas», subraya el alcalde de Trabazos, que ha rememorado algunas de las víctimas mortales sucedidas en los incendios que han afectado a la provincia durante las últimas décadas y a la persona que sufrió un infarto mientras era evacuada de Sejas de Aliste.