En su intervención de este domingo por la mañana ante los medios, el jefe del servicio territorial de Medio Ambiente de la Junta, Manuel Moreno, lanzó una advertencia: «En los incendios, no existe el riesgo cero». Es decir, mientras el fuego siga activo, no hay que descuidarse. Las llamas se pueden reavivar, pero lo cierto es que, a medida que pasan las horas y se consolida el perímetro, parece más difícil pensar en un escenario igual o peor al del sábado en Trabazos y los pueblos del entorno. La sensación generalizada es que la situación se ha dominado.
De hecho, a lo largo de este domingo han sucedido algunas cosas que invitan a la tranquilidad, aunque todo el mundo mantenga los ojos abiertos. El mejor síntoma es que, a eso de las seis de la tarde, la Junta declaró el descenso en el nivel del incendio del 2 al 1, al entender que no existía riesgo para la población. Habían pasado 22 horas desde que las llamas pusieran en jaque a Sejas de Aliste y obligaran a cortar la Nacional 122.
Ahora, con los vecinos de este pueblo en casa desde por la mañana y con la carretera libre para la intensa circulación de vehículos habitual en una fecha como esta, el escenario es de un fuego «estabilizado», con las labores de extinción pendientes de «eliminar puntos calientes para evitar el riesgo de reproducciones.
Aún así, cerca de las ocho de la tarde, todavía estaban destinados decenas de medios aéreos y terrestres a la zona para contribuir al control definitivo del fuego en un domingo en el que el tiempo ha ayudado, como ya intuían los expertos. Moreno indicó, ya por la mañana, que las rachas de viento iban a ser sensiblemente inferiores a las de la jornada anterior, por lo que los efectivos han podido trabajar con mejores condiciones sobre el terreno.
Con esa premisa, desde el propio Puesto de Mando Avanzado ubicado en la gasolinera de Sejas, se han podido observar durante toda la jornada algunas columnas de humo y el trasiego constante de los helicópteros para cubrir las zonas de riesgo.
Las causas del incendio
El responsable del servicio territorial también ha indicado que las causas del incendio están siendo investigadas en estos momentos por los agentes medioambientales y del Seprona, y ha revelado que esperan tener indicios en las próximas horas. Moreno ha admitido que «resulta plausible» y «podría encajar» que el fuego haya sido intencionado.
El fuego había calcinado, según las primeras estimaciones realizadas tras la noche del sábado al domingo, unas 280 hectáreas, aunque habrá que esperar a la perimetración definitiva para conocer el dato final.