El concierto de Omar Montes en Moraleja del Vino durante el pasado fin de semana supuso la celebración de un evento con muchos asistentes en una zona rural de la provincia, una circunstancia no tan habitual en un territorio como este y que exigió «un dispositivo importante» para controlar la seguridad.
Así lo ha señalado este lunes el subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco, durante la reunión de coordinación con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, con cuyos responsables ha constatado que no se produjeron grandes alteraciones del orden público en el entorno del espectáculo.
Sí se registraron algunas denuncias, pero básicamente relacionadas con el tráfico o con la tenencia de drogas. Los agentes también prestaron un auxilio sanitario y colaboraron con la organización para facilitar las entradas y salidas del recinto.
Por otro lado, desde la Subdelegación han comunicado que durante los próximos días se celebrarán reuniones con distintos alcaldes de la provincia en aras de reforzar la colaboración para la seguridad en las fiestas patronales. Este mismo lunes se ha celebrado un encuentro de estas características con los dirigentes de Fuentelapeña.