Los grupos políticos del PSOE e Izquierda Unida en la Diputación Provincial critican el uso, a su juicio partidista, que el PP está haciendo de la institución en la polémica sobre la reducción de horario de atención al público en los cuarteles. Ambos grupos hacen estas declaraciones después de participar en una reunión con la Subdelegación del Gobierno, reunión en la que el subdelegado Ángel Blanco ha vuelto a poner de manifiesto que «no se cerrará ningún cuartel» en la provincia y que los resultados de la propuesta se estudiarán en otoño para tomar una decisión definitiva.
Los socialistas denuncian lo que califican como «campaña de desinformación» por parte del Partido Popular, «que utiliza la Diputación de Zamora con fines partidistas para cargar en contra del Gobierno de España, cuando es una medida que adopta exclusivamente la Comandancia de Zamora». En cambio, señala el Partido Socialista, «los populares callan cuando se trata de instar a la Junta de Castilla y León contra el cierre de los consultorios en la Zamora rural».
«Las medidas que se llevarán a cabo se enfocan, por tanto, en optimizar los recursos y mejorar el servicio de los zamoranos y zamoranas», indica el PSOE. Poco que ver estas declaraciones, en cualquier caso, con las realizadas por alcaldes socialistas en la provincia de Zamora como José Fernández o Felipe Lubián, que ven de nuevo en la propuesta de reducción de la atención un campo de pruebas en el que Zamora puede salir perjudicada.
Sobre esta cuestión, PSOE e IU comparten argumentario. Izquierda Unida, por su parte, apunta que «lamentamos que no haya hecho», el presidente de la Diputación, «lo mismo con la disminución de horas y el cierre evidente de los consultorios médicos en zona rural y otros servicios, donde la Diputación ni ha cogido firmas, ni siquiera ha levantado la voz, y criticamos que utilice partidistamente la institución provincial para desgastar a gobiernos que no son de su partido y callar ante gobiernos de su mismo color político».
Sobre el fondo de la cuestión, IU defiende el objetivo de la reestructuración (más patrullas a cambio de menos atención presencial en los cuarteles), pero lamenta que se haga con los mismos agentes que hay actualmente y no con más incorporaciones.