Leticia García Sánchez ya ejerce como consejera de Industria, Comercio y Empleo. La política zamorana ha asistido este viernes a la toma de posesión de su sucesor en la Delegación Territorial, Fernando Prada, y se ha marchado a continuación a Valladolid para asistir a la puesta de largo de su nuevo equipo y mantener las primeras reuniones internas de trabajo con la vista puesta en el lunes, cuando abrirá su agenda institucional.
Dentro de ese capítulo, García Sánchez ha fijado como primera reunión un encuentro con los agentes que componen la mesa del diálogo social. Y no es un hecho casual. La consejera es consciente de la brecha abierta entre la Junta y los sindicatos durante la etapa de Mariano Veganzones (Vox) al frente del área, y aspira a reconducir la situación desde el minuto uno, como ha deslizado en una breve atención a los medios en Zamora.
De hecho, según ha comentado la propia consejera, uno de los encargos que le ha hecho el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ha sido el de «potenciar de nuevo, más aún, el diálogo social». Y ahí, en letras grandes, aparece el nombre del Servicio Regional de Relaciones Laborales (Serla), cuyo futuro pendía de un hilo con Veganzones y que ahora ha de «funcionar adecuadamente», según Leticia García.
La consejera no ha entrado en más detalles, pero su declaración de intenciones inicial apunta a una relación mucho menos tirante con los sindicatos: «La primera reunión será una toma de contacto con el ánimo de escucha», ha insistido García Sánchez, que atenderá «inquietudes y propuestas» y que ha repetido en varias ocasiones la palabra «diálogo».
En esa línea irán los primeros pasos de la zamorana al frente de su nueva responsabilidad, en la que también tendrá que abordar la encomienda presidencial de reforzar «la pujanza industrial y seguir protegiendo a los trabajadores».