Menos atención presencial en los cuarteles de los pueblos y más patrullas en las calles de la provincia. Esta es la medida, acertada para los responsables de la Comandancia de la Guardia Civil de Zamora y tramposa para los alcaldes, que se propone para reestructurar el servicio que la Benemérita presta en Zamora. Los detalles, conocidos para el público desde hace días, los han puesto hoy sobre la mesa el subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco, y el jefe de la Comandancia, Héctor David Pulido, en una reunión con alcaldes afectados y con el presidente de la Diputación. Reunión celebrada, censuran estos últimos, a hechos consumados.
Tanto Blanco como Pulido se han esforzado en subrayar que la decisión de reducir la atención de oficia presencial y sustituirla en gran medida por la unidad móvil que se ha puesto en marcha en Zamora «no viene del Gobierno» y sí del propio seno de la Comandancia zamorana. «Hay cuarteles que atienden a menos de una persona a la semana como media», insiste Pulido para justificar la medida. A la par, insiste en que los agentes que dejen de prestar estas funciones pasarán a patrullas. Sobre este particular, según los estudios, la provincia de Zamora ganará 39 patrullas de la Guardia Civil al mes.
Sin embargo, la cuestión va más allá de lo puramente operativo. Los alcaldes dicen no entender por qué sus pueblos pierden un nuevo servicio y ya empiezan a oír los mismos ecos que llegaron cuando los consultorios médicos cerraron «de forma puntual». Ha puesto voz al sentir de los alcaldes Felipe Lubián, alcalde de Lubián. «Tememos que lo que venga después de esto sea el cierre del cuartel», apunta a las puertas de la reunión. «Ya sabemos de qué va esto. Las decisiones las toman urbanitas en Zamora, Valladolid o Madrid. Y llegará el día en que alguien diga que el cuartel de Lubián no tiene sentido, y se cerrará porque vive poca gente en la zona, y nos dirán que tenemos que ir a Puebla de Sanabria».
Lubián pone el ejemplo de los consultorios médicos y de la atención presencial, sobre todo desde la pandemia de coronavirus. «Ha pasado antes. Yo he visto a mi pueblo perder muchos servicios desde que soy alcalde, y digo por experiencia que lo que se pierde, no se recupera».
No se cierran cuarteles
De vuelta a la argumentación oficial, la Subdelegación y la Comandancia insisten en que «no se cierran cuarteles». La pérdida de seguridad percibida, con todo, es evidente, pues no es lo mismo ver un cuartel de la Guardia Civil abierto que encontrarlo cerrado y sin nadie viviendo dentro, como sucederá durante la mayor parte de los días en Fonfría, por ejemplo. Pulido insiste en que las patrullas siguen saliendo y llegando al mismo cuartel, y que «tendrán llaves» para abrir en caso de que suceda cualquier situación que haga necesario entrar a las instalaciones.
«Esta reunión llega tarde»
Javier Faúndez, presidente de la Diputación de Zamora, asegura por su parte que la reunión «llega tarde» y pide responsabilidades al subdelegado del Gobierno y no solo al jefe de la Comandancia. «Algo tendrá que decir como superior jerárquico» de la Guardia Civil en Zamora, apostilla el presidente de la Diputación.
Faúndez censura, además, el argumentario que justifica la medida. «En los cuarteles debe haber alguien, no nos vale que nos digan que la patrulla de la zona tiene la llave. Los cuarteles tienen que estar abiertos y los pueblos no pueden perder más servicios. Para entendernos, es como si Diputación centralizara todos los CEAS en Zamora porque muchos de los que hay en los pueblos no atienden a un gran número de personas. Eso no es admisible».
Concentración y medidas de presión
Para este sábado a las once de la mañana se ha convocado una concentración a las puertas del cuartel de la Guardia Civil de Villardeciervos, uno de los veinte afectados por la medida. Por su parte, la Diputación de Zamora ha remitido cartas a los alcaldes para que las firmen en protesta por la pérdida de servicios, misiva que han secundado ya más de 160 regidores municipales. La Diputación baraja volver a llevar la moción de rechazo al próximo Pleno: «Si quieren hacer algo, que vean que va en contra del sentir de toda la provincia», concluye el presidente de la Diputación.