El lío se precipitó tras la denuncia de Comisiones Obreras: faltan médicos en la provincia, y algunos de los que deberían estar, dado el lugar en el que han sacado la plaza, se quedan en Valladolid con una comisión de servicio que cuenta con el permiso explícito de la Consejería de Sanidad. Precisamente, el área que debe de velar por la prestación de una asistencia sanitaria adecuada en todos los rincones de la comunidad.
Consciente de estos hechos, la delegada territorial de la Junta en Zamora, Leticia García Sánchez, ha mantenido un primer contacto con el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, con quien se reunirá finalmente el lunes para abordar la realidad de «pérdida de facultativos» en la provincia y para estudiar «qué medidas tomar» en aras de paliar esta situación.
García Sánchez ha admitido que, recientemente, «tres médicos de Benavente se han ido en comisión de servicio a la provincia de Valladolid, mientras que un médico más ha sido liberado por una organización sindical». «Tenemos esa pérdida de cuatro médicos y ya pasábamos por importantes dificultades en atención primaria», ha concedido la delegada.
En esa línea, García Sánchez ha deslizado que la asistencia sanitaria ha de verse «en términos de cohesión territorial» y ha confirmado que, junto al consejero, se valorarán todas las posibilidades: llegada de médicos extracomunitarios, presencia de los MIR de último año o los tan manidos incentivos: «Insistiremos en que son una posibilidad para Zamora, que siempre tiene carencias más importantes», ha advertido la delegada.
La representante zamorana ha agradecido «la máxima disposición del consejero» y ha apuntado que «la zona más crítica» es en estos momentos la comarca de Benavente, lastrada por la pérdida reciente de cuatro facultativos. Según García Sánchez, la situación en Sanabria y en La Carballeda «ha mejorado».