La formación UPL en Morales del Vino teme que el pueblo se quede sin piscina de verano en esta temporada estival. «Todas las piscinas de la provincia han abierto o están a punto de hacerlo, pero de la de Morales, en manos de una empresa privada, nada se sabe». El estado de la piscina es malo y en el propio bar del recinto temen que no se abra, con las pérdidas económicas que ello supondría.
«De no cambiar las cosas, la piscina de Morales no parece que vaya a abrir sus puertas este verano», indican desde UPL. «Las instalaciones en la actualidad ofrecen una imagen de abandono total, sin que se observe preparativo alguno y sin que la corporación municipal ofrezca noticias, por lo que no se vislumbra que pueda ponerse en funcionamiento este año, como sería deseable». Preguntado por esta cuestión, el equipo de Gobierno tampoco ha ofrecido más explicaciones a este periódico.
Así, denuncia UPL, “los vecinos tendrán que desplazarse a otro municipio o a la capital para darse un baño, y todo ello después de haber costeado unas instalaciones que no pueden usar”, manifiesta Marta Vicente.
La empresa que gestiona la piscina de verano es la misma que abre el centro deportivo Morales Sport, también de capa caída. «Una obra faraónica, con un coste de más de dos millones de euros», que funciona a medio gas. Las piscinas descubiertas de pádel y tenis están abandonadas, la de fútbol sala está cubierta de malas hierbas y la piscina cubierta está vacía y sin uso. Todo esto «sin que la alcaldesa del PP, Carmen Lorenzo, pueda encontrar solución a un problema derivado de su mala gestión», aseguran las mismas fuentes.
Marta Vicente asegura haber pedido explicaciones «sin otro resultado que la callada por respuesta». La construcción del complejo deportivo, insisten desde UPL, «ha conducido a la ruina económica al municipio, pero desde el PP eluden asumir su cadena de errores, inicialmente en la inversión realizada y después en la entrega de la gestión sin plenas garantías a una empresa privada». Los moralinos «pagan ahora las consecuencias, como quedarse posiblemente sin piscina de verano, del mismo modo que llevan sin poder hacer uso de la climatizada y de otras instalaciones desde antes de la pandemia».