El sindicato UGT acusa al Ayuntamiento de Toro de las malas condiciones de trabajo de la Policía Local. Un cuerpo en el que, aseguran, solo hay seis efectivos disponibles porque, de los once existentes, cinco están de baja. Una plantilla escueta con la que hay que cubrir el servicio de mañana de lunes a domingo y las noches de los viernes y los sábados, dejando la tarde «a expensas de si hay algún agente libre o si hay que reprogramar porque hay algún evento en Toro».
La mala situación actual, dice el sindicato, emana de un cambio en la organización del que culpan directamente al alcalde, Rafael González. El escenario, indican, era tranquilo hace ahora un año, con once trabajadores cubriendo el turno de mañanas y tardes. Al no existir operativo nocturno, era la Guardia Civil la que intervenía si se producía alguna llamada vía 112. «El problema viene cuando el señor alcalde considera que el servicio de Policía Local hay que prestarlo también los viernes y sábados por la noche con dos policías de servicio».
Para realizar este «ajuste», insiste UGT, «hay que realizar cambios en el calendario de trabajo, cambiar turnos o suprimir descansos». Las consecuencias, asegura el sindicato, son «supresión de descansos, cambios constantes en los turnos, meses en los que los agentes no tienen ni un fin de semana de descanso completo, denegación de días de asuntos propios e incluso previsión de que pueda suspender el periodo vacacional asignado».
UGT asegura el alcalde «no quiere llegar a ningún acuerdo». La solución propuesta por el sindicato sería «compensar el esfuerzo realizado por los pocos efectivos disponibles» mediante un acuerdo económico y «a medio y largo plazo completar la plantilla» existente en la Relación de Puestos de Trabajo.
«La situación de precariedad que sufre la plantilla de policía de Toro se debe únicamente a la acción y a la omisión de las decisiones del Alcalde. Le solicitamos que con carácter de urgencia convoque a la Mesa General de Negociación para alcanzar un acuerdo que le ponga solución a este problema que a cada día que pasa se agrava más», insisten desde UGT.