No será una rehabilitación integral, conllevará un detallado estudio previo de las zonas en las que se va a actuar para identificar “lesiones y procesos patológicos” y priorizará las actuaciones para “garantizar la estabilidad y la estanqueidad” de la muralla. Así será la actuación que el Ministerio de Cultura, propietario de la mayor parte de la muralla de Zamora, comenzará a ejecutar en los próximos meses en cinco tramos del monumento zamorano. En las zonas en las que se actuará, que fueron dadas a conocer por el alcalde hace algo más de un mes, se trabajará para “eliminar todo riesgo de desprendimiento” o “colapso” de las mismas, una situación que ahora sobrevuela en los tramos con peores condiciones.
Las condiciones en las que se encuentra la muralla saltan de nuevo a la actualidad después de los desprendimientos sucedidos en la ronda de Santa Ana, cerca del centro cultural La Alhóndiga. Se suman estos a los de la ronda de Santa María la Nueva, hace algo más de un mes. Tramos que no están incluidos en los prioritarios para el Ministerio de Cultura, que sí actuará en la trasera de la Catedral, San Martín, avenida de la Feria, Arco de Doña Urraca y ronda del Degolladero. El resto de la muralla tendrá que esperar a mejor ocasión, aunque el Ayuntamiento ya trabaja en ello.
Las actuaciones en todos los tramos tienen sus particularidades, pero hay algunos puntos comunes a todas ellas. Se desbrozará la zona y se retirará la vegetación enraizada, se consolidará el núcleo de la muralla mediante lechada de mortero de cal y, en los sitios en los que sea necesario por su precariedad, se desmontarán los muros de manera manual para reponer después las piedras. Las coronaciones del muro se tratarán para evitar filtraciones, se evaluarán los sistemas de drenaje y evacuación de aguas para detectar posibles fugas y se consolidará, cuando sea preciso, el estrato rocoso sobre el que se asienta la muralla. Un estrato también deteriorado, como atestiguan los desprendimientos que hace unas semanas se experimentaron en la avenida de la Feria.
Tramo de Baltasar Lobo
Se refiere a la parte trasera del castillo, básicamente. La intervención será en el lienzo exterior, puesto que en la parte de intramuros ya se ha actuado con anterioridad. “Debido al carácter de las lesiones” de esta zona, “las actuaciones se encaminarán principalmente a consolidar el lienzo colindante con el foso del castillo, que se encuentra colonizado por vegetación”. Además, será necesaria la identificación de posibles filtraciones de agua desde el foso hacia la muralla.
San Bernabé
La parte de San Martín hasta la esquina más cercana al parking, que ya se reformó. Presenta desplomes intramuros y humedades. Se trata de una zona “fuertemente erosionada. Debido a los múltiples desprendimientos en todo el tramo, será necesaria una inspección detallada para actuar en consecuencia”. En caso de resultar imprescindible, habrá que contar con la colaboración del Ayuntamiento y de los propietarios de las parcelas para actuar intradós.
Avenida de la Feria
Desde San Martín hasta la puerta de la Feria, salvando un tramo cercano al primer parque. Se trata de consolidar principalmente la cara interior de la muralla, la que da la ronda de Santa María, “donde se ha detectado una gran superficie afectada por la disolución del núcleo y de los rejuntados”. En el lienzo exterior las actuaciones serían más puntuales. “Se deberá abordar la consolidación y restauración” de la zona” “desde la roca base”, pues casi todo el lienzo está ya liberado.
Arco de Doña Urraca
Se trata aquí de proteger el muro. El peor punto es el colindante a Mesones número 3, así como al cubo sur de la Puerta de Doña Urraca, agrietada en su coronación. En el resto del tramo, se trata de eliminar filtraciones, consolidando los puntos necesarios.
Ronda del Degolladero
Se trata igualmente de frenar la erosión y la pérdida de material de varios puntos, valorando la incidencia de la filtración a través de jardines privados. Requerirá de especial atención el Torreón de San Pablo, del que habrá que realizar “un diagnóstico de los procesos que le afectan y que las intervenciones anteriores no han logrado paliar”.