Tras varios meses de trabajo en el taller, tras un ir y venir continuo a los dibujos y con algún que otro quebradero de cabeza, José Javier Sánchez ha conseguido terminar, y exponer, la escultura de un pastor con la capa alistana en la que lleva muchas semanas trabajando. La figura se puede presenciar desde el Domingo de Ramos en una pastelería de la plaza de La Marina y, confía su autor, «va a convertirse en el photocall de esta Semana Santa».
«Zamora vaciada», que así se llama la creación, muestra a un pastor alistano que, visto de espaldas, parece que camina. Sin embargo, al asomarse a su rostro, vemos que la capucha está vacía. «Es una metáfora de esta provincia que se vacía de personas», apunta su autor, creador además de una serie de figuras de forja sobre las mascaradas de la provincia.
La escultura lleva durante esta semana un farol, para asemejarse a la estética de la Procesión de las Capas Pardas del Miércoles Santo por la noche. El farol es, con todo, un accesorio que se puede intercambiar por un bastón, que es como su autor la prefiere.
La escultura, como todos los trabajos que realiza el vecino de Sanzoles, se ha realizado en forja fría. Esto es, placas de hierro que José Javier «doma» a base de golpes, lija y radial. El escultor intentará que la obra esté expuesta de forma permanente en Zamora, para lo que ha iniciado conversaciones con el Ayuntamiento de Zamora.