La sala de prensa de la Diputación de Zamora, habitualmente reservada a comparecencias sobre la actualidad diaria de la institución provincial, ha acogido este martes una cita entre los medios de comunicación y la directora y los protagonistas principales de la película sobre Nevenka, que se está rodando durante estas semanas en distintas localizaciones de la ciudad, incluido el propio Palacio de La Encarnación. Así, la cineasta Icíar Bollaín y los intérpretes Mireia Oriol y Urko Olazabal han comparecido para ofrecer detalles sobre la grabación y opiniones acerca de la historia real de la concejala de Ponferrada que están adaptando a la ficción.
La encargada de llevar la voz cantante de las intervenciones ha sido Bollaín, que ha explicado que «la ficción siempre aporta más emoción» a historias como la de Nevenka, que sufrió acoso por parte de su compañero y alcalde de Ponferrada, Ismael Álvarez, a principios de los 2000: «Ella se enfrentó a todos los prejuicios y ganó, y ahora con Mireia, la protagonista, queremos sentir su proceso y su viaje en esta película», ha argumentado la directora.
Además, Bollaín ha aclarado que, en relación a lo que pudieron ver los espectadores en el documental de Netflix sobre el caso, su cinta tratará de incorporar a un tercer protagonista más allá de la concejala y el alcalde: «Queremos que sea ese pueblo de Ponferrada, que también era testigo de todo lo que estaba pasando», ha remarcado la cineasta.
Precisamente al hilo de la capital berciana y de la decisión de grabar la película en otra ciudad, Bollaín ha señalado que su equipo y ella se desplazaron a Ponferrada «por cuestiones artísticas, para tomar referencia del lugar» y ha matizado que, de cara a lo que hubiera sido un hipotético rodaje, no encontraron «ni una respuesta positiva ni negativa». «Nos quedamos en ese limbo, seguimos buscando y encontramos a Zamora», ha recordado la directora, que ha calificado la acogida aquí «de formidable».
El equipo de Nevenka ha rodado en distintas localizaciones exteriores de la ciudad, con un buen número de extras de la zona y en instituciones como la Diputación, donde se ha recreado la sala del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, el lugar del juicio entre la concejala y el alcalde. También en el antiguo palacio provincial se han rodado escenas que simulan las Cortes autonómicas. «Está siendo un rodaje estupendo», ha insistido Bollaín.
En cuanto a la historia como tal, la directora ha hablado de una batalla «de David contra Goliat» y de la vida de «una joven brillante, ilusionada, con las ganas de hacer las cosas bien», que se topó con el acoso que arranca cuando Ismael Álvarez «no entiende que se ha acabado una relación».
Además, en aras de entender todo el proceso, el papel de la propia Nevenka Fernández ha sido clave: «Ha estado de acuerdo desde el principio y hemos hablado muchísimo con ella. Nos ha contado todo lo que vivió, nos ha facilitado contacto con gente de su entorno y ha seguido muy de cerca todo; hemos mantenido una conversación continua», ha aseverado Bollaín, que ha subrayado que esta mujer «se plantó ante un abuso de poder».
La presión de «una ficción basada en la realidad»
Precisamente, la encargada de trasladar toda la fuerza de ese personaje a la pantalla es Mireia Oriol, que no conocía previamente la historia, pero que, inmersa en ella, ha sentido «la presión de que es una ficción basada en una realidad muy latente hoy en día». «He sentido la obligación de contar está historia con toda la verdad posible. Se trata de remover conciencias», ha abundado la actriz.
Por su parte, el actor que encarna a Ismael Álvarez, Urko Olazabal, ha admitido que inicialmente no sentía al personaje: «Lo tenía muy alejado de mí», ha apuntado el intérprete, que ha reconocido que «hay escenas duras», pero que ha dejado claro que ha terminado por tomar las riendas del papel a base de intuición y del estudio del perfil de los abusadores.
Ya en el cierre de la comparecencia, Bollaín ha insistido en que la película no habría sido posible sin la colaboración de la ciudad en el rodaje y ha confirmado su intención de presentar la cinta en un pase especial en Zamora cuando llegue el momento: «Espero que la producción lo pueda organizar», ha zanjado.