Renfe mantendrá el número de plazas entre Zamora y Madrid mientras duren las obras en la estación de Chamartín, que afectarán a la circulación a partir del día ocho de abril. Aunque la operadora reducirá el número de frecuencias y habrá modificaciones horarias, «el número de plazas se mantendrá para facilitar la movilidad de los viajeros».
Así las cosas, Renfe sacará a la venta el lunes 11 de marzo los billetes para la línea Madrid-Galicia hasta el próximo 6 de mayo «con la intención de que los ciudadanos puedan disponer de una oferta comercial para organizar sus desplazamientos con tiempo, desde el final de la Semana Santa hasta el final del puente de mayo, que en Madrid se alargará con motivo de la festividad del día 2», asegura la operadora. No se podrán comprar billetes para más allá del siete de mayo, de momento.
Aunque se suprimirán, como ya informó este periódico, cuatro trenes (dos por cada sentido), la circulación de maquinaria en doble composición permitirá que la capacidad no varíe, «compensando de esta manera la diferencia de frecuencias en los servicios», eufemismo para hablar de una reducción de coches. «El nuevo plan de transporte se prolongará mientras duren las obras, hasta entrado el mes de julio», confirma la operadora.
Los retrasos de los nuevos trenes
Renfe tenía programado que esta reducción de horarios se llevara a cabo con los nuevos trenes S106 ya en circulación, «según la fecha que Talgo había comprometido». «Si Talgo hubiera entregado los S106 esta reorganización hubiera permitido incrementar más aún la oferta de plazas». Esto, indica la operadora, no será posible «en primera instancia porque Renfe aún no puede contar con los trenes de Talgo». La operadora confirma así que los nuevos trenes no estarán tampoco para principios de abril, una vez las modificaciones que ha anunciado entran en vigor el día 8 de ese mes.
No obstante, en el momento en que «Talgo entregue los nuevos trenes, Renfe los pondrá en circulación, de forma que los ciudadanos puedan beneficiarse de un mayor número de plazas de las nuevas unidades». Renfe ya cuenta con un número de maquinistas «suficiente» para la puesta en circulación de la nueva maquinaria.
Los S106, que están pasando las pruebas de fiabilidad, en las que se están detectando algunos problemas, «cuentan con más de 500 plazas por convoy, mientras que los Alvia tienen una media de 300 plazas por tren».