Más de veinte personas se enfrentan a sanciones de una u otra índole por los sucesos ocurridos en la noche del lunes en la A-6 a la altura de Paradores de Castrogonzalo, cuando un grupo de unos doscientos manifestantes cortaron la autovía, de noche, y se enfrentaron a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Además, hay seis personas que están siendo investigadas por delitos contra la seguridad vial y por las heridas causadas a los agentes en estos sucesos. A estos se suman los dos detenidos, que han sido puestos en libertad este martes según ha informado el subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco.
El subdelegado ha asegurado que la presencia y el importante operativo policial desplegado desde el mismo momento en que llegaron los manifestantes no fue suficiente para detener a los agricultores en su intento de cortar la vía. «El diálogo con ellos fue imposible», ha añadido Blanco. «Algunos decían que iban a cortar la autovía de forma decidida, con actitud amenazante. No querían dialogar».
El representante del Gobierno en Zamora ha dado detalles de los sucesos y del operativo policial, al que ha dividido en tres partes. La primera, que no dio frutos, fue la preventiva. «Se desplazó a la zona el Grupo de Reserva y Seguridad, un grupo de élite que llegó de Pontevedra. También agentes de Seguridad Ciudadana de Zamora, del subsector de Tráfico y se desplegó un dron». Una presencia «que no fue suficiente para disuadir».
Se inicia entonces un proceso infructuoso de diálogo que lleva a la tercera fase, la del desalojo por la fuerza, que hasta ahora no se había aplicado en las manifestaciones celebradas en Zamora desde la primera, el pasado 30 de enero. «Algunos manifestantes acudieron con palos, quemaron bidones, lanzaron piedras y causaron heridas» a los agentes, detalla Blanco.
Los sucesos se saldaron con nueve guardias civiles heridos, tres de cierta gravedad trasladados al Hospital de Benavente (uno con la nariz rota, otro con la clavícula partida y otro con dos dedos fracturados). El resto no precisó de atención médica. Algunos manifestantes también abandonaron la zona con contusiones por el enfrentamiento con los agentes.
Los agentes sufrieron también daños en los medios materiales, con abolladuras en los coches y escudos rotos. La autovía se cortó a las 22.40 y estuvo cortada dos horas y diez minutos en sentido Madrid, provocando retenciones de 3,3 kilómetros, y dos horas y media en sentido Galicia, con un atasco similar.
