La patronal zamorana, CEOE-Cepyme, asegura que Zamora es una de las provincias de Castilla y León en las que la subida del Salario Mínimo Interprofesional resulta más lesiva para las empresas. Una subida, indican fuentes empresariales, que «afecta negativamente a la competitividad» de las sociedades zamoranas. En la provincia, continúan las mismas fuentes, el nuevo SMI supone el 77,3% del sueldo medio de la provincia, un porcentaje que se eleva hasta el 89,1% en el caso de las empresas de menos de cincuenta trabajadores. Zamora solo se encuentra por detrás de Ávila en lo relativo a estos datos.
El acuerdo sobre el sueldo base, indican fuentes de la patronal, «tiene evidentes consecuencias sobre el empleo» y «no tiene en cuenta la evolución de la productividad de la economía española o la situación económica». En el primer caso, CEOE asegura que la productividad «registró la peor evolución de los países avanzados entre 2018 y 2023, con una caída del 3,8% que contrasta con un aumento medio del 4,6% en los países de la OCDE. Además, «pese a que en los últimos años la inflación ha aumentado, el SMI ha crecido un treinta por ciento más que los precios».
«La actualización del SMI tampoco tiene en cuenta la situación económica, que da claras muestras de desaceleración para los próximos meses. Mientras el SMI ha subido un 52% en los últimos cinco años, el PIB ha crecido menos de 1% anual desde 2018″, apunta la patronal.
Así, «en cuanto a los sectores, destaca el impacto que ha tenido en el sector primario y en algunas ramas de servicios en los últimos años el alza del SMI. Sin embargo, el sector agropecuario no está contemplado en la Encuesta de Estructura Salarial del INE, que el Gobierno toma como base para establecer el aumento del sueldo base».
La subida tiene además, concluyen los empresarios, efectos para el empleo. «El aumento continuado del SMI desde 2018 ha impactado negativamente en la creación de empleo. El resultado es la no creación de hasta 210.0000 puestos de trabajo, con datos actualizados al IV trimestre de 2023, siendo los más afectados las personas jóvenes y los colectivos menos cualificados», apuntan.