En unas instalaciones plagadas de cristaleras, zonas comunes y espacios que invitan a la reunión emerge uno de los proyectos más ambiciosos que se han puesto en marcha para resucitar al sector de la innovación en Zamora. El nuevo hub de La Aldehuela, orientado a la tecnología aplicada al sector de los cuidados, comenzará a funcionar de manera inminente, después del trámite administrativo ejecutado este lunes, que fue escenificado con una firma política entre los dirigentes de la institución que presta las dependencias, la Diputación, y la que gestionará el centro, la Junta.
Sentados en la parte trasera de la sala abovedada donde se celebró el acto protocolario se encontraban algunos de los protagonistas de este hub, los dirigentes de las empresas y entidades que desembarcarán en La Aldehuela una vez tengan luz verde. Se prevé que la espera no dure más de unos días. Entre los proyectos que llegarán a Zamora a través de este movimiento se encuentran los de la Fundación Intras o los del Air Institute, que miran con ambición al futuro y que tienen unas expectativas muy elevadas de lo que puede suponer la creación de este espacio en la ciudad.
«Hay mucha tecnología que todavía no existe»
En el caso concreto de la Fundación Intras, su director general, Pablo Gómez, que acudió al acto acompañado por el responsable provincial de la entidad, Adrián Pérez, explicó que la creación del hub se enmarca en una época en la que «la tecnología resulta absolutamente necesaria». «Uno de los grandes retos es cómo llevar a cabo los cuidados de una manera personalizada e individualizada, y para eso hace falta mucha tecnología. Además, hay que intentar que esos procesos se hagan en los entornos naturales de las personas», explicó Gómez.
En esa línea, el dirigente de Intras subrayó que «hay mucha tecnología que todavía no existe o que se aplica en otros sectores y que hay que adaptar al de los cuidados». «Para producir eso, hay que movilizar muchos proyectos y debemos promover la innovación tanto social como tecnológica. Eso no se puede acometer de manera individual, hay que hacerlo con equipos multidisciplinares que muchas veces exceden lo que es la propia organización», argumentó el director general de la fundación.
Por ejemplo, Intras presta servicios asistenciales y produce tecnología, pero aún así precisa de «la conexión con otras empresas que tienen sus propias especialidades». «Aquí vamos a hacer el ensamblaje de ayudas técnicas para que las personas puedan utilizar esos recursos en sus domicilios y en los centros. Hablamos de andadores e inodoros inteligentes que vamos a implementar de la mano de empresas», remarcó Pablo Gómez.
Lo cierto es que, para el director general de Intras, «trabajar cerca tiene muchas ventajas». Para empezar, la convivencia con culturas laborares diferentes como las que pueden tener «un terapeuta, un psicólogo, un ingeniero o un estadístico». «Cuando hay una conexión y un trabajo conjunto, la generación de proyectos se incrementa», zanjó Gómez, en declaraciones a este medio.
En otra zona de La Aldehuela se ubicará el proyecto del Air Institute, que estuvo representado en el acto de puesta de largo por Yeray Mezquita, facilitador del grupo de inteligencia artificial, y por Fernando de la Prieta, colaborador de la institución y profesor de la Universidad de Salamanca. Este último destacó que la fundación llegará «cuanto antes» a Zamora para «trabajar en un concepto muy novedoso dentro de la inteligencia artificial que se llama espacio de datos».
En concreto, «se van a recuperar datos de muchas fuentes, se van a organizar y se van a poner a disposición para investigar y para que los puedan utilizar empresas en una gran cantidad de iniciativas». De la Prieta dejó claro que, en este tipo de desarrollos tecnológicos, «la frase de solo llegas más rápido, pero acompañado más lejos es una realidad». «La tecnología es una mezcla de conocimientos y no todos tenemos la misma capacidad. En sitios como este se crean sinergias y se ayuda a mejorar y a que avancen los proyectos», apostilló.
Para el docente e investigador, la ciudad se beneficiará de lo que se va a materializar en el hub: «Todo lo que ayude a crear tecnologías más punteras que permitan que otras empresas puedan establecerse aquí es algo bueno. Además, tenemos una universidad con grado en Informática o en Videojuegos que permite que los alumnos que acaben puedan quedarse en Zamora y participar en proyectos de envergadura. Las grandes empresas tienen que ver que existe ese caldo de cultivo para querer venir y hacer esa apuesta», remarcó De la Prieta.
Bragança y el resto de Europa
Esa mirada va más allá de firmas españolas. El propio Air Institute trabaja ya con entidades como el Instituto Politécnico de Bragança, que es «muy potente en ingeniería, industria 4.0 o electrónica», pero el hub nace con vocación de expandirse y no solo en Portugal, «sino en toda Europa». «En tecnología no se puede hablar prácticamente de desarrollos locales, todo se mueve a nivel internacional», aseveró De la Prieta.
El Air Institute ocupará la parte de arriba de las dependencias de La Aldehuela. La idea es que la fundación arranque en las instalaciones con veinte personas, la mitad del total que se prevé para el arreón inicial del hub: «Estamos deseando venir», concluyó De la Prieta.