El uso obligatorio de la mascarilla en Zamora podría tener los días contados. De hecho, no es descartable que el próximo martes deje de ser innegociable su uso en centros sanitarios y sociosanitarios. La orden publicada por la Consejería de Sanidad el pasado miércoles da pie a ello, pues indica que «el Gobierno central ha establecido que las comunidades autónomas que presenten datos de descenso de la Incidencia Acumulada de Infecciones Respiratorias Agudas durante dos semanas consecutivas, según los datos reportados al Ministerio de Sanidad por medio de la Red de Vigilancia, podrán pasar, si así lo consideran adecuado según el conjunto de su situación epidemiológica, de la situación de obligatoriedad del uso de mascarillas en centros sanitarios a una situación de recomendación de uso».
En Castilla y León la incidencia de las enfermedades respiratorias en la población comenzó a descender en la primera semana del mes de enero, impulsada por la caída de las infecciones en la población pediátrica. Esto es algo habitual, pues coincide con las vacaciones navideñas en los colegios, cuando hay menos contacto entre grupos de niños y, por tanto, la transmisión disminuye.
Sin embargo, la pandemia ya puso sobre la mesa que, una vez la incidencia comienza a bajar, lo normal es que continúe en esa tendencia al menos durante unas semanas. Si se consolida la situación, es decir, si Castilla y León registra menos casos este martes que los del martes pasado, es de prever que ya no sea obligatorio llevar mascarilla en los hospitales y centros de salud.
Lo que piensa la Consejería
Si se prevé que la Consejería elimine la obligatoriedad de las mascarillas en cuanto se confirme (si es que sucede) la caída de los contagios es porque el consejero del ramo, Alejandro Vázquez, se ha mostrado muy crítico con la imposición el uso del tapabocas. Vázquez aseguró, al término de la reunión del Consejo Interterritorial de Salud, que Castilla y León «acata» la orden del ministerio, «como no puede ser de otra manera», pero apostilló que la obligación de la mascarilla «debe hacerse con el debido rigor científico». Un rigor que ahora, argumenta el consejero, falta.
Vázquez aseguró que el Consejo Interterritorial no hizo un análisis de la situación de la epidemia y aseguró que los datos existentes en la actualidad «son incluso más bajos que los registrados en la época previa a la pandemia», razón por la cual «no se comprende» la urgencia en obligar al uso de la mascarilla.