La Diputación de Zamora ha abierto la puerta a reclamar al Ayuntamiento de la capital la titularidad del castillo de la ciudad, de su propiedad y cedido al Consistorio a través de una cesión demanial firmada en el año 2004. El documento fue firmado por Fernando Martínez Maíllo y Antonio Vázquez cuando ambos ocupaban las máximas responsabilidades en la Diputación y en el Ayuntamiento de Zamora, respectivamente.
Sobre esta cuestión Javier Faúndez, presidente provincial, ha asegurado que «no es una amenaza, es una realidad» y ha apuntado que si el Consistorio, como parece, aprueba que el ayuntamiento viejo sea la sede permanente del Museo de Baltasar Lobo, «tendremos que sentarnos a hablar». La única condición existente en el documento de cesión era que el Castillo acogiera la obra de Lobo. «Si esto no se hace, el contrato se incumple».
«Si el Ayuntamiento toma la decisión de llevarse la obra a la Plaza Mayor la Diputación llamará al equipo de Gobierno y les diremos que existe un documento, que supongo que conocían. Es una situación de normalidad, pero hay que ponerlo encima de la mesa para que a nadie le pille por sorpresa», ha asegurado Faúndez al ser cuestionado por los periodistas después de la celebración del Pleno del mes de enero.
Una de las posibilidades que se ponen sobre la mesa es que la Diputación recupere el Castillo de Zamora. «Es un bien patrimonial que ahora es del Ayuntamiento y que puede dejar de serlo si se incumple la finalidad con la que se cedió». Con todo, Faúndez no ha querido hablar de cerrar al público el Castillo. «No lo haríamos nosotros», ha asegurado.