Davinia Alonso va a por la tercera en 2023. La zamorana (de Vezdemarbán y que durante muchos años ha residido en Toro, aunque ahora vive en San Román de Hornija), ganó el premio Gordo de la Lotería de Navidad el año pasado gracias a un décimo del 5.490 y otro pellizco, esta vez en forma de quinto premio, en el año 2018 gracias al número 7.568. «Dicen que tengo suerte», asegura Alonso a Enfoque. Dicen, claro.
¿Cómo vive uno un año después de que le toque la lotería? «Pues mucho más desahogada», afirma Davinia, que durante estos últimos doce meses ha zanjado la hipoteca de su vivienda, ha pagado las deudas que tenía y se ha dado algún que otro capricho.
«Da mucha tranquilidad. Tampoco es una barbaridad de dinero el que toca en Navidad, pero sí da para pagar las cosas pendientes y vivir con menos preocupaciones», añade esta zamorana. «Yo tenía claro que, si algún día me tocase, lo iba a gastar en pagar la hipoteca. Y así ha sido», apostilla.
El Gordo le llegó el año pasado, recuerda, por «pura casualidad«. Fue un décimo comprado en Valladolid, en la administración de Rio Shopping, un día que «tuve que ir a hacer unas compras con la niña». Pensaba en adquirir uno que acabara en nueve, pero al final cogió otro que acababa en 90. El que resultó premiado con 400.000 euros.
«El quinto le tocó a todo el pueblo»
Más curioso fue, no obstante, el caso del quinto premio del año 2018. Parte de ese número se vendió en el bar de San Román de Hornija, un bar que regenta su madre. Dotado con 6.000 euros al décimo, Davinia llevaba dos. La cuenta es fácil: 12.000 euros. Sin embargo, aquella alegría «fue más especial» porque, recuerda la zamorana, «fue compartida». El bar repartió, en total, más de 2,4 millones de euros. «Prácticamente le tocó a todo el pueblo«, asegura.
¿Va a por la tercera? «Dicen que tengo suerte. Juego, no mucho, pero sí juego. Yo creo que ya va a ser mucha suerte pero bueno, hay gente que dice que tengo una estrella en la cabeza», afirma Davinia, que el 22 de diciembre, como la mayoría de los españoles, estará pendiente del Sorteo de Navidad. «Anda, que como me toque otra vez…».