No habrá vaciados sanitarios en las explotaciones de vacuno por un solo caso de tuberculosis bovina. La presión de la Plataforma Defensa Ganadera Sayago ha surtido efecto y, hace unos días, la Administración confirmó que la provincia entra en el llamado protocolo de Gamma Interferón, que implica «una prueba complementaria a la de rutina» con el fin de detectar posibles casos. Sea como fuere, los profesionales no tendrán que sacrificar a todas sus reses cuando aparezca un único positivo.
En un comunicado público, la plataforma sayaguesa ha confirmado esta decisión, cuya culminación se dirimió el pasado jueves día 23 de noviembre en la reunión mantenida en Valladolid. Allí asistieron representantes provinciales de Asaja, UPA-COAG, UCC y Urcacyl, acompañados por ganaderos del colectivo, así como por la directora general de Producción Agrícola y Ganadera, Teresa Rodríguez Vidal y la jefa de servicio de Sanidad Animal de Castilla y León, Anna Grau Vila.
Un argumento «unánime»
En dicha reunión, el sector ganadero «fue unánime en oponerse frontalmente al vaciado sanitario de las explotaciones sayaguesas con tan solo un animal confirmado». Los afectados hicieron hincapié en la realidad del sector vacuno extensivo, cuya forma de subsistencia «no puede ir separada de la convivencia en el campo con otras especies silvestres vector de la tuberculosis, lo que hace muy difícil, prácticamente imposible, pretender la erradicación mediante el sacrificio masivo de bóvidos».
Los ganaderos consideran evidente que «seguirá habiendo reservorios en el campo» y que, por tanto, «el riesgo de contagio de las cabañas ganaderas que se volviesen a introducir para reponer los sacrificados seguiría existiendo en la misma medida, lo que expone al ganadero de forma constante a verse en la angustiosa situación del vaciado sanitario».
Con estos pilares básicos como argumento de los ganaderos, la Dirección General se ha mostrado durante todo este periodo «plenamente comprensiva con la encrucijada a la que se veían enfrentados los ganaderos, y en todo momento ha estado comprometida con la protección al sector». Los afectados agradecen que se haya buscado «una salida razonable, acorde a la realidad del campo y que no condene el futuro de las ganaderías de la zona».
Ideas que «no se correspondían con la realidad»
Así, finalmente se procedió a desestimar las propuestas de vacío sanitario para implementar a cambio «una solución menos drástica, que garantice la seguridad sanitaria de la zona y que permita a los ganaderos continuar con su único medio de vida». «La no realización de los vaciados sanitarios conlleva la paralización del proceso de declarar la provincia de Zamora como indemne de tuberculosis para 2024, hecho este que preocupaba de manera notable a la mayor parte ganaderos de vacuno, que veían en esta declaración no se correspondía con la realidad palpable del campo y comprometía su futuro», han remarcado desde la plataforma
El colectivo se ha mostrado «satisfecho por esta decisión» ya que, «en tiempos realmente duros para la ganadería, la noticia es un alivio». «La declaración de la provincia de Zamora como indemne en las condiciones reales que tenemos en el campo suponía una carga añadida a los ganaderos por las graves implicaciones que mantener ese estatus sanitario supondría año tras año», han aseverado.
«Nos gustaría agradecer públicamente el trato recibido por la Administración, que nos ha recibido y nos ha escuchado en todo momento; el apoyo que hemos tenido por parte de los profesionales del sector ganadero, de la zona y de fuera de ella, de los sindicatos agrarios, cuya implicación ha sido crucial, de los alcaldes de Sayago, cuyo manifiesto de apoyo fue fundamental, de Unión Por la Ganadería, que nos ha acogido con los brazos abiertos desde que conocieron nuestra circunstancia, de los medios de comunicación y de todas aquellas personas que, aunque su actividad no sea la ganadera, han empatizado con nuestra situación y la han tomado como suya», han concluido desde la plataforma.