La ampliación de la plataforma única en las calles del centro de Zamora sigue avanzando. El Ayuntamiento de la capital prevé iniciar este lunes los trabajos para incorporar Martínez Villergas a ese grupo de vías con preferencia peatonal, en lo que constituye otro paso más en el camino hacia “la mejora de la movilidad urbana” que defiende el equipo de Gobierno municipal.
Las obras en esta vía pegada al Mercado de Abastos exigirán algunos cambios en el tráfico, como comunicó recientemente el propio Ayuntamiento de Zamora.
Lo que hay que tener en cuenta desde este lunes 13
En concreto, se cortará al tráfico la calle Martínez Villergas en el tramo comprendido entre la calle Flores de San Pablo y la plaza del Mercado, por lo que el desvío del tráfico para acceder a la plaza del Mercado deberá realizarse por la calle Flores de San Pablo y por la calle Traviesa.
Además, la calle Flores de San Pablo cambia su sentido habitual de circulación y pasa a ser sentido único (calle San Pablo – calle Traviesa). El Ayuntamiento instalará para ello la correspondiente señalización y anulará la que sea contradictoria.
Finalmente, el tramo de la calle Traviesa, comprendido entre la plaza del Mercado y la calle La Brasa, cambiará también su sentido habitual de circulación, y pasará a ser de sentido único hacia la plaza del Mercado.
Como consecuencia de esta nueva regulación, se verán afectadas las líneas de autobuses urbanos con parada en la plaza del Mercado durante el tiempo de duración de las obras.
Respecto a los vehículos autorizados, los de carga y descarga, taxis, usuarios de garajes y usuarios del aparcamiento de la plaza de la Constitución, todos ellos podrán realizar el acceso por el nuevo itinerario previsto. El tránsito peatonal para acceso a viviendas, locales y comercios no se verá afectado, ya que se habilitarán itinerarios compatibles con la ejecución de las obras.
El objetivo de los trabajos
En esta calle, una de las vías ubicadas en el entorno del Mercado de Abastos, se ampliará “de forma significativa” el espacio para los peatones, según subrayaron la semana pasada el alcalde, Francisco Guarido, y el concejal de Obras, Pablo Novo. Ambos aludieron a las quejas de los vecinos por el escaso espacio habilitado hasta ahora para el tránsito de personas con movilidad reducida y para los carros de los bebés. Eso debe cambiar tras la obra.
De hecho, según los planes trazados por el equipo de Gobierno municipal, el ancho de la acera pasará de algo menos de un metro en algunos puntos “a más del doble” para facilitar que los vecinos caminen sin dificultades. Esa ampliación de las zonas reservadas exclusivamente a los viandantes se combinará con la eliminación del bituminoso en la calzada para colocar losas y adoquines de hormigón.
En septiembre, Novo había aportado algunos detalles más al respecto. Entre ellos, que la intervención dividirá la vía en dos zonas peatonales que tendrán 1,96 metros de espacio. El carril central, en cambio, será de 2,60. Pablo Novo avanzó igualmente que esta plataforma enlazará con el nuevo espacio del Mercado de Abastos, una vez comiencen las obras para remodelar el inmueble.
El aparcamiento alrededor del frontón, “a lo largo de 2024”
Uno de los compromisos adquiridos por el equipo de Gobierno, ya durante la primera fase de creación de calles de plataforma única en el pasado mandato, fue el de habilitar plazas de aparcamiento en el entorno para poder estacionar. La primera novedad en ese sentido será la puesta a disposición de 80 espacios de zona azul alrededor del frontón San Atilano: “A lo largo del año 2024 es tiempo suficiente para hacerlo”, confirmó la semana pasada Francisco Guarido.